Por Jorge I. González Lic. en Derecho y Ciencias Políticas Egresado del CRUSAM-UP.
El Centro Regional Universitario de San Miguelito de la Universidad de Panamá, arriba a su treinta aniversario, sus bodas de perla. Fue fundado el 8 de septiembre de 1993. Conocido por sus distintivas y sin iguales siglas, el CRUSAM actualmente funciona en los espacios de la “Gran Estación”.
Cuenta con una población estudiantil de seis mil estudiantes y como veremos, con perspectiva de crecimiento. Es un centro de educación superior en crecimiento, en pleno desarrollo, que oferta tanto carreras de licenciatura, técnicos, diplomados, postgrado y maestrías. El CRUSAM es liderado por el Dr. Luis Acosta Betegón, Director.
Su gestión se ha caracterizado por una administración progresista que ha robustecido la función y proyección de la Universidad de Panamá en la zona más habitada del país. Así mismo, el CRUSAM ha sido impulsor de los programas educativos universitarios en los centros penitenciarios, específicamente, en el Renacer y el Centro Femenino de Rehabilitación.
Estos programas constituyen aportes emblemáticos en las páginas de la educación panameña y latinoamericana. A lo largo de sus 30 años y operando en un principio en el Instituto Ángel Rubio, el CRUSAM ha graduado a miles de profesionales provenientes mayormente de sectores populares, contribuyendo a la movilidad social y al crecimiento científico-técnico y académico, cultural de las poblaciones de San Miguelito, Panamá Norte y Este.
Durante la pandemia del covid-19, el CRUSAM mantuvo en todo momento abierta sus operaciones administrativas y las clases fueron exitosas, impartidas de manera virtual. En ningún momento se detuvo la dinámica educativa del centro regional, lo cual es sumamente loable, desafiando los pronósticos catastrofistas generados en tan difíciles y dolorosas circunstancias de pandemia, pero en donde también afloró lo más valioso del ingenio humano y el CRUSAM fue y sigue siendo una prueba de ello.
La construcción de la nueva sede, el fruto de una lucha prolongada y tenaz de generaciones de estudiantes, profesores y administrativos, viene a ser la corona, la cristalización de un sueño históricamente anhelado. Una obra de grandes proporciones, sin igual en el devenir de la educación pública superior panameña.
La nueva sede estará ubicada en el corregimiento de Las Cumbres, un magífico campus que abarca nueve hectáreas y en las que se construyen más de una decena de edificaciones impresionantes, según los cánones tradicionales de la educación pública de nuestro país y en especial, del Distrito de San Miguelito y Panamá Norte.
El CRUSAM será el campus universitario más grande del país, solo superado por el campus central de la UP. Este cambio trascendental tendrá repercusiones de carácter tanto cuantitativo como cualitativo.
Cuantitativamente, la nueva sede permitirá mejores y mayores instalaciones físicas, asumir a una población superior a los siete mil estudiantes, lo cual será posible a través de la ampliación exponencial de la cantidad de salones de clase, lo que dará mayor espacio potencial para la creciente población de las zonas populares de San Miguelito, Panamá Norte, la carretera Transístmica e incluso, hasta de localidades de Panamá Este.
En lo cualitativo, las instalaciones del nuevo CRUSAM permitirán la consecución de un contexto ambiental mucho más propicio para la proliferación de la vida universitaria de manera integral, con edificios grandes, amplios, estructura de estacionamientos, numerosos salones, todos con aire acondicionado, pasillos oxigenados, áreas verdes, biblioteca, dos edificios para gimnasio con posibilidad de convertirse en auditorio, un centro de innovación tecnológica y científica, calles internas amplias, zonas para el deporte y el ciclismo.
Será un cambio revolucionario en la educación de un importante segmento de la población panameña.
Desde el punto de vista de la demografía académica, las nuevas instalaciones permitirán brindar la educación superior a más de 7 mil estudiantes de San Miguelito con todas las ventajas descritas, además, cabe señalar que con la nueva sede habrá un proceso de expansión de la cobertura a las comunidades de Chilibre, Las Cumbres y los pueblos de la carretera Transismica.
La nueva ubicación estratégica tendrá de esta forma una repercusión de avanzada en materia social, garantizando, mediante la educación científico-técnico y humanística en nuevas y mejores instalaciones, la superación material y cultural de la juventud de las poblaciones mencionadas, coadyuvando así a la movilidad social necesaria contra la pobreza y aportando en mejores condiciones a la cualificación de la fuerza de trabajo técnico-profesional de la región y con ello, de la nación.
La instauración de la nueva sede crusamtina traerá consigo una influencia más atrayente, contundente, en regiones de alta concentración poblacional que se encontraban distantes de las actuales instalaciones del CRUSAM y del campus central Octavio Méndez Pereira.
Así las cosas, la profesionalización de tantos miles de panameños y de panameñas repercutirá sociológicamente en la denominada movilidad social de las áreas involucradas, esto es, cambios en las condiciones socioeconómicas de los y las estudiantes a través del estudio y en como ello se reflejará en el crecimiento de los indicadores de las comunidades con la profesionalización concreta de la oferta educativa, contribuyendo a los ingresos, prestación de servicios profesionales en las comunidades, igualmente, las consecuencias positivas en ocupación, educación, entre otras dimensiones económico-sociales.
Con la apertura de la nueva sede que se traducirá en el mejoramiento de la infraestructura, la ampliación de la planta docente y del espacio para aulas de clase, el perfeccionamiento de la oferta tecnológica y la implementación de todas las facilidades antes descritas incluyendo la infraestructura bibliotecaria, de estacionamientos, la sana recreación y para el deporte. Gracias a este conjunto de avances, los estudiantes de San Miguelito, Panamá Norte, las comunidades de la autopista a Colón e incluso, estudiantes provenientes de Panamá Este, no tendrán que desplazarse muy lejos de sus aposentos residenciales.
Además, la nueva sede repercutirá positivamente en la economía local del corregimiento, pues el área en cuestión se verá beneficiada, pues con la afluencia de más personas se incrementará el comercio y en el campo de la economía individual, supondrá para los y las estudiantes y sus familias, ahorro de tiempo y de recursos económicos en concepto de transporte.
Será, sin lugar a dudas, una transformación progresista en materia educativa, social y cultural. Revolucionario. La evolución dialéctica, expresión de continuidad y cambio, de una epopeya que empezó con un grupo de educadores visionarios hace treinta años. Panamá, 8 de septiembre de 2022
