Mientras los consumidores siguen agobiados por el alto costo de los medicamentos en Panamá, el Alcalde de Santiago, Samid Sandoval, se reunió con distribuidores de productos farmacéuticos para analizar la situación de los exagerados precios de las medicinas en este país.
En el encuentro que se realizó de manera virtual, participaron directivos de la Asociación de Representantes y Distribuidores de Productos Farmacéuticos (AREDIS), que agrupa a unas 13 empresas del sector, quienes plantearon su punto de vista sobre los costos de las medicinas en Panamá, en comparación con otros países.
“Mi objetivo es ser una voz y un mediador entre las farmacéuticas y el gobierno, a fin de que se busquen alternativas puntuales para bajar los precios de las medicinas en beneficio de toda la población”, planteó el alcalde Sandoval.
Durante la jornada de diálogo, Sandoval, quien ha sido una de las voces que a nivel nacional ha cuestionado el alto costo de las medicinas en el mercado local, fue enfático en señalar que urge una exhaustiva revisión de la Ley 1 del 10 de enero de 2001, sobre medicamentos y productos para la salud humana.
“Aquí hay una falta de voluntad gubernamental, para resolver este tema, que también abarca el alto precio de los insumos médicos”, agregó el funcionario municipal.
Sandoval compartió su inquietud con los distribuidores de medicamentos, sobre el por qué en Panamá los precios de las medicinas son desproporcionadamente más altos que en países cercanos como Colombia, México y Ecuador.
“Hay que hacer los esfuerzos por crear en Panamá fábricas de medicamentos, que nos ayuden a resolver esta crisis que agobia a todos los panameños”, apuntó el alcalde santiagueño.
Según la autoridad local, después de este encuentro queda claro que los distribuidores no son los causantes de los altos precios de las medicinas, porque estos costos los fijan las empresas fabricantes de los fármacos.