La Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (APEDE) presentó su segundo Reporte Económico Ejecutivo Mensual, un análisis que confirma que la economía panameña continúa creciendo, aunque a un ritmo más moderado, y destaca la importancia de tomar decisiones estratégicas para impulsar la inversión, el empleo y la competitividad del país.
El documento revela que el Producto Interno Bruto (PIB) creció 4.4% en el primer semestre de 2025, impulsado principalmente por los sectores logísticos, turísticos, financieros y de transporte aéreo. Al mismo tiempo, el IMAE de agosto marcó un crecimiento de 1.61%, reflejando una desaceleración respecto al año anterior, pero confirmando que Panamá mantiene una senda de expansión sostenida.
APEDE resaltó también que, a pesar de los desafíos internos y del complejo escenario global, Panamá conserva su grado de inversión, tal como reafirmó recientemente la agencia Moody’s. Aunque la perspectiva continúa siendo negativa, el país ha logrado mantener su calificación, lo que refuerza la necesidad de fortalecer la disciplina fiscal, mejorar la eficiencia del gasto y promover reformas que aumenten la productividad y la certidumbre jurídica.
El informe subraya señales de alerta en el mercado laboral y en la inversión extranjera directa. La IED cayó -121% en el primer semestre de 2025, producto de la salida de capitales y menores reinversiones, mientras que la contratación formal acumulada hasta julio mostró una contracción del -5% frente al mismo período de 2024. No obstante, los datos de MITRADEL reportan un repunte hacia octubre en sectores como construcción, hotelería, logística, manufactura y servicios al cliente, lo que sugiere una recuperación gradual.
De igual forma, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró -0.04% en septiembre, reflejando una demanda interna débil pero también condiciones favorables de estabilidad en los precios para los hogares.
La presidenta de APEDE, Giulia De Sanctis, destacó que este segundo reporte busca ofrecer una lectura clara de la realidad económica, pero también impulsar el diálogo y la acción.
“Panamá sigue creciendo y mantiene su grado de inversión, pero ese crecimiento debe sentirse en la vida de la gente. No basta con avanzar: hay que avanzar con propósito. Este segundo reporte confirma que tenemos desafíos importantes —empleo, inversión, productividad— pero también oportunidades reales para corregir el rumbo. Hoy más que nunca necesitamos decisiones basadas en evidencia, coordinación público-privada y políticas que generen confianza. La estabilidad económica es un activo que hay que cuidar con responsabilidad”, afirmó.
El gremio empresarial insistió en la importancia de apostar por una estrategia nacional que combine estabilidad fiscal, diversificación productiva, seguridad jurídica y estimulación a sectores con potencial de alto impacto, como logística, tecnología, agroindustria, economía creativa y turismo.
APEDE reiteró su compromiso con la transparencia y el fortalecimiento institucional y aseguró que seguirá publicando este reporte económico mensualmente para aportar información oportuna y confiable que permita orientar decisiones estratégicas en beneficio del país.
“Nuestro compromiso es aportar más luz en tiempos de incertidumbre”, concluyó De Sanctis. “Panamá tiene los fundamentos para seguir creciendo; ahora necesitamos acelerar las soluciones y construir confianza para que ese crecimiento se traduzca en oportunidades reales para todos.”