El descubrir que se tiene una enfermedad, no siempre resulta fácil, por lo que es importante el apoyo familiar y la alianza médico – paciente para descubrir si además de la patología, se padece de depresión.
La médico psiquiatra Malaika Fagette Wilson, explicó que hay personas que al conocer que tienen un padecimiento, tras recibir el diagnóstico manifiestan un estado de negación. Además pueden sentir que su vida cambiará e inicia una reacción de duelo, pasando luego a la ira, que puede ser hacia otra persona o a sí mismo, donde se preguntan, ¿por qué a mí?
“Es una serie de cuestionamientos y enojos porque la persona aspira en el fondo que no le estuviera sucediendo lo que está viviendo”, acotó.
Señaló que al pasar esta fase, pueden caer en depresión, al pensar que no hay remedio. En ese momento, destacó la doctora, que lo deseable es que el paciente pueda comunicarle al médico sus sentimientos para que reciba la mayor orientación posible, y ser remitido a un especialista en salud mental, ya sea un psicólogo o psiquiatra, porque la depresión sería otra enfermedad añadida a la ya existente.
La psiquiatra resaltó el papel fundamental de la familia para descubrir señales depresivas en su familiar, como lo sería el no poder dormir, el estar ansioso, sentirse muy inseguro o mostrar miedo.
“Si esa persona ya no es la misma de antes, no se ríe como antes, no se viste como antes, la familia es quien puede ayudarla a buscar ayuda médica psiquiátrica. La familia puede ser la que motive el uso del tratamiento indicado y lo apoye y supervise”, precisó.
Reconoció que además sus parientes pueden manifestarle al paciente deprimido que lo aman, apoyan y comprenden.
Resaltó que existen patologías crónicas comunes como la diabetes o la presión alta y hay pacientes que la tienen y no hacen un adecuado cuidado de su salud por estar en estado de negación o depresivo y le mienten al médico sobre su alimentación.
Reiteró la importancia de la alianza médico – paciente, para quien manifieste síntomas de depresión, pues con el galeno podrá esclarecer dudas, temores, puesto que lo se quiere es que la persona acepte su condición, y se involucre activamente en su proceso de tratamiento.
La doctora subrayó que entre médico y paciente debe existir confianza y si el doctor no la genera, puede optar por cambiar de especialista, porque la relación médico – paciente es importantísima en ese proceso y buscar el control o la resolución de la enfermedad.
Necesitamos que el paciente pueda hacer frente al estrés normal de la vida, pero si le cuesta, debe acudir a un especialista en salud mental que le brinde ayuda psicológica, psicoterapéutica, mecanismos de afrontamiento, de aceptación y técnicas de relajación y de ser necesario el medicarse, en caso que el cerebro también se enferme.