El Ejército Nacional de Colombia en conjunto conjunta, con la Fuerza Aérea, la Armada, la Policía y la Fiscalía de ese país, capturaron a alias Mica Tropo, sujeto señalado de ser el principal cabecilla de la red terrorista urbana del Frente de Guerra Oriental del Eln.
En el mismo hecho se produjo la muerte en desarrollo de operaciones militares de alias Pajaro, quien sería el cabecilla de milicias de la comisión Omaira Montoya Henao del Frente Domingo Laín Sanz del mismo grupo armado organziado.
Estos individuos, al percatarse de la presencia de los soldados, abrieron fuego contra los militares, y en ese intercambio de disparos se logró la captura del primero de ellos. El segundo, alias Pajaro, resultó herido. Después de asegurar el área, los socorristas militares, salvaguardando la vida y ceñidos al respeto de los derechos humanos y en cumplimiento de las disposiciones del derecho internacional humanitario le brindaron los primeros auxilios. Posteriormente, fue trasladado en un helicóptero del Ejército Nacional hacia la capital araucana para recibir atención médica prioritaria, pero finalmente murió en el centro asistencial.
Mica Tropo, según las autoridades, tendría una trayectoria criminal de más de 12 años en esa estructura terrorista, con amplia experiencia y entrenamiento delictivo en el desarrollo y orientación de acciones terroristas de alto impacto, mediante el empleo de artefactos explosivos improvisados en los municipios de Saravena, Fortul y Tame, departamento de Arauca; era el hombre de confianza de alias Raúl o Nacho, cabecilla principal del Frente de Guerra Oriental, del GAO Eln.
Por su parte, alias Pájaro, muerto en desarrollo de esa operación militar, contaba con un historial criminal de más 14 años al interior del Eln y cumplía con labores delictivas de coordinador logístico de acciones criminales, llevando a cabo la adquisición de material bélico e intendencia con el fin de proveer a las comisiones del frente Domingo Laín Sanz del Eln. También estaría encargado de realizar las actividades ilegales sobre el casco urbano de los municipios de Arauquita y Fortul. A su vez era el orientador de las redes de apoyo para el desarrollo de acciones terroristas contra la fuerza pública y la infraestructura critica del Estado.
Dentro de las acciones terroristas en las que se señala la participación de estos individuos se destacan el crimen del subcomandante de la estación de policía de Fortul el 25 de marzo de 2017. El 28 de marzo habría ordenado el asesinato de dos soldados del Ejército tras un hostigamiento en el caserío Caranal de Fortul cuando escoltaban a un bus de servicio público. Así mismo el ataque a un pelotón del Ejército Nacional, el 11 de septiembre del 2021, hecho que dejó a un suboficial y cuatro soldados profesionales asesinados y seis más heridos. También habría coordinado y direccionado el movimiento de cuatro delincuentes del Eln en un vehículo, para realizar las fotografías en el corregimiento de La Esmeralda, el pasado 16 de enero; asimismo habría planeado y ejecutado la acción terrorista con artefactos explosivos contra un convoy militar en el municipio de Fortul, Arauca, el pasado jueves 3 de febrero, donde un soldado fue asesinado y dos más heridos; otras acciones terroristas incluyen ataques al oleoducto Bicentenario, para continuar con la estrategia que tiene el Eln de afectar tanto a integrantes de la Fuerza Pública como a la población civil e infraestructura estratégica del Estado, en el departamento de Arauca.
El capturado y el material incautado quedaron a disposición de las autoridades competentes.
Las operaciones militares se continuarán realizando de manera conjunta, coordinada e interinstitucional en el departamento de Arauca, con el objetivo de seguir desarticulando las estructuras logísticas y criminales de los grupos armados organizados que delinquen en esta región del país, responsables de las afectaciones contra la población civil y la Fuerza Pública, con flagrantes violaciones a los derechos humanos e infracciones al derecho internacional humanitario.