Panamá propuso en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos (UNOC3), a través del ministro de Relaciones Exteriores, Javier Martínez-Acha Vásquez, la creación de la primera reserva marina transnacional de alta mar y una red latinoamericana que incluya a los jóvenes en la gobernanza y educación para preservar la vida en el mar.
Esta cumbre, copatrocinada por Costa Rica y Francia, constituye una plataforma estratégica para acelerar la implementación del Objetivo de Desarrollo Sostenible 14 de conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.
“Como nación que une dos océanos y que alberga un Canal interoceánico al servicio del mundo, reafirmamos nuestro compromiso inquebrantable de protección de los océanos, la ciencia abierta y el multilateralismo”, dijo el canciller Martínez-Acha Vásquez, durante el inicio de los debates de la Cumbre de Niza 2025 que reúne a 63 jefes de Estado y de Gobierno y delegaciones de 190 países miembros de la ONU.
En canciller Martínez-Acha Vásquez, acompañado por el ministro de Ambiente, encabezan la delegación panameña en la tercera Conferencia de la ONU sobre los Océanos, copatrocinada por Francia y Costa Rica, que busca consensuar una política común y recaudar fondos para la conservación de los mares del planeta.
En la Conferencia de Niza 2025, el canciller panameño propuso la creación de la primera reserva marina transnacional con una extensión de 10 millones de kilómetros cuadrados con la participación de Colombia, Costa Rica y Ecuador.
Al mismo tiempo planteó la formación de una red latinoamericana juvenil de gobernanza y de educación sobre los océanos.
Antes de la apertura de la Conferencia de Niza, el canciller panameño se reunió con el ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Mauro Viera, con quien abordó la importancia de la neutralidad permanente del Canal y su papel fundamental en la estabilidad internacional.
En la reunión también se reafirmó el compromiso con la defensa del Canal como un bien público global y se reconoció la importancia de los puertos panameños como parte de la infraestructura estratégica global para el comercio internacional.
Ambos cancilleres destacaron la relevancia de la relación bilateral en materia de seguridad y la cooperación en ese ámbito por parte de los dos países. También expresaron el interés en fortalecer la capacidad operativa y estratégica de las fuerzas de seguridad, así como fomentar inversiones conjuntas en ese sector.
Acordaron trabajar en incrementar el comercio bilateral y continuar el diálogo para la exclusión de Panamá de la lista brasileña de jurisdicciones de baja imposición y en materia de transparencia fiscal.
El canciller Martínez-Acha Vásquez y el canciller Viera, también conversaron sobre la importancia de la integración regional en el marco del Mercosur y respaldo a la próxima cumbre de ese organismo en julio próximo en Buenos Aires.
Panamá se comprometió en trabajar con Brasil para el éxito de la próxima reunión sobre cambio climático COP30 en Brasil para la construcción de consensos climáticos internacionales.
Sobre la Cumbre de los Océanos, el canciller Martínez-Acha Vásquez enfatizó que los océanos son fuente de vida, de cultura y sustento. “Estamos en un momento decisivo y el efecto de amenazas como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la sobrepesca y la contaminación por plásticos. No hay planeta B, solo tenemos este planeta”, recalcó.
Los océanos cubren el 70% del planeta y se enfrentan amenazas críticas como el cambio climático, la sobrepesca, la contaminación, la escasa inversión y la fragmentación de la gobernanza.
El canciller panameño destacó, al mismo tiempo, que Panamá ha cumplido en un 54% en la protección de sus aguas jurisdiccionales y a través de la Autoridad del Canal de Panamá aplica rigurosos protocolos ambientales para prevenir la contaminación de buques y la seguridad en el mar. Eso incluye la protección de cetáceos y especies marinas.
El país mantiene medidas contra la sobrepesca, lidera programas de vigilancia de los océanos y de alerta de sunamis, lo mismo que la cooperación científica e intercambios oceanográficos. Eso incluye la protección de los humedales, la lucha contra la pesca ilegal y la reducción de uso de pesticidas.
El canciller Martínez Acha-Vásquez recordó que Panamá es uno de los tres países del mundo con carbono negativo, pero eso no lo hace invulnerable a los efectos del cambio climático. “Negar el cambio climático no lo va a detener. Invito a unir esfuerzos porque los océanos no pueden esperar más ni el planeta tampoco”, subrayó.
