En un esfuerzo por modernizar las prácticas agrícolas tradicionales del cultivo de arroz, el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) impulsa el proyecto Acciones de Mitigación Nacionalmente Apropiadas (NAMA), que busca incorporar agrotecnología en más de 100 productores de Chiriquí, Coclé y Veraguas. Esta iniciativa, financiada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y ejecutada por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), se enfoca en la reducción de la densidad de siembra, el uso controlado de fertilizantes y agroquímicos, y la adopción de modelos de agricultura de precisión.
El proyecto también incluye un análisis de suelo para mejorar la aplicación de fertilizantes y el control oportuno de plagas, logrando una disminución en los costos de producción y un aumento en los rendimientos. Roberto Linares, ministro de Desarrollo Agropecuario, destacó los esfuerzos para hacer más competitiva la producción de arroz ante la apertura de mercados internacionales, con rendimientos actuales que van de 97 a 104 quintales por hectárea y costos que oscilan entre $2,300 y $2,700 por hectárea.
