Si te pudiera mentir Te diría que aquí Todo va marchando muy bien Pero no es así Esta casa es solo un pensamiento Que me habla de ti Y es tu voz como este mismo viento Que hoy viene hacia mí -Si Te Pudiera Mentir de Marco Antonio Solís-
Es la décima vez que suena en la rocola del bar de Calidonia, toca “Si Te Pudiera Mentir”, los clientes del lugar se empiezan a molestar. Él está con una botella de Johnnie Walker a las rocas.
El dueño del bar interviene antes que uno de los presentes le reviente una botella en la cabeza, harto de las baladas. Una salonera chama, le murmura a una paisana, nunca he visto un sufrir así por mí.
La maracucha con mejor figura que Diosa Canales le dijo a la caleña, si quiere me lo como para que se olvide de esa mala mujer.
Antonio, el propietario del boite estudio en la facultad de derecho, de allí la amistad con el abogado.
Entre el alcohol y el cigarrillo, el pobre despechado recordaba a una mujer que lo abandono. T
oño, entre carcajadas, se sienta y le dice a su amigo, hombre, son las 10 de la noche, llegaste a mediodía y has bebido como si mundo se fuera acabar.
Hombre, no sé que te hizo esa gueva, para que estés así. Tiempo a tras nuestro caballero, sostuvo un tórrido romance con una joven. Los que lo conocen se sorprendían ver como un cínico mujeriego se había enamorado de esta aparecida.
Ella nunca hablaba de su pasado, él la presentaba como su novia ante sus amigos y familiares.
En la cama y fuera de ella tenían una gran química. Cuando él le propuso que vivieran juntos en su departamento, ella aceptó sin dudar.
Como tenía cosas que hacer el día indicado de la mudanza, le dio la llave para que entrada en su nueva casa.
De vuelta a casaél compró una botella de vino y un ramo de rosas, encontró una nota de despedida.
“Querido JF, puedo vivir contigo o volver a verte otra vez. Solo puedo decirte que te amo y que Dios te bendiga. Esmeralda”.
Toño le dice a la maracucha, se aparece después de 10 años y lo deja hecho un guiñapo.
Jf nunca supo él ¿por qué?, ella se fue por lo que nunca pudo cerrar el ciclo con esta mujer del demonio.
La verdad es que Esmeralda, cuando salía con el desdichado, estaba casada a punto de divorciarse, de pronto recapacitó y se reconcilió con su marido, el abogado recién graduado nunca lo supo.
Hace una semana ella le tocó la puerta a pedir ayuda en un asunto legal.
¿De todos los abogados del país, tuvo el cinismo de buscar al desdichado?.
Ella no tuvo valor de decirle la verdad, eso fue lo que más le dolió a él.
