InicioEntretenimientoEl amarre de amor de la chola

El amarre de amor de la chola

Este relato en particular fue inspirado en un cuento de Bram Stoker, titulado “El invitado de Drácula”. Esta obra corta es un episodio del diario de Jonathan Harker y el primer capítulo del manuscrito original de Drácula, que los editores consideraron superfluo para la historia, según su viuda.

Hace algunos años me tocó hacer un voluntariado en una zona comarcal del país. Nos hospedamos en una casita de madera, nada del otro mundo.

Uno de los jovenes el área llamado Juancho nos servía de guía e interprete. Una tarde algo aburrido salía a caminar, el inmenso verde me deslumbró… Detrás mío, Juancho trataba de que regresará al caserío.

A la distancia vi una quebrada, sin pensarlo me acerque a tomar unas fotos eran más o menos las 5 de la tarde. Me quite las botas para meter los pies en el agua, cuando levante la cabeza pude ver a una mujer que se bañaba en el lugar, mientras me miraba se enjabonaba la entrepierna.

De la impresión me quede inmóvil… Ella seguía con el baño sin ningún tipo de pena o sobresaltó… En eso reaccione y salí de prisa del agua, analizando el lio en que había metido.

No se aún porque mire para atrás… Seguía echándose agua con la totuma… Me grito ¿Por qué no me acompañas?. Me tropecé con una rama. Me fui de cara contra el suelo.

Para mi sorpresa, la muchacha me ayuda a levantarme. Se le notaban los pezones bajo la blusa, no era una mujer indígena, más bien era mestiza. Me agarró la mano y la dirigió a sus senos firmes mientras sonreía.

Te he visto desde hace días, pero hasta hoy has venido a visitarme. Se sacó uno de los senos… Yo seguía paralizado mientras ella forcejeaba para amamantarme como si fuera un crio. Me tumbo, se levantó la falda, sacó mi miembro y comenzó a cabalgar.

Señor, señor, señor, despierte me sacudía Juancho con fuerza, lo anterior nunca paso o eso creo, estaba arañado y sucio. El paisano me dijo que me perdió de vista unos 5 minutos y una voz lo guió a la quebrada.

Le conté mi sueño se persignó y susurró, que no era bueno.

En la mañana siguiente la mujer del sueño de la quebrada pasó por el caserío de camino al pueblo me miro y se sonrió. No tengo recuerdos de como y porque me desmaye, que animal o cosa me aruño y majó en la quebrada.

La versión de Juancho es que me querían hacer un amarre. ¿Ustedes que creen?.

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