InicioEntretenimientoEl que se enamora pierde

El que se enamora pierde

“Antes de empezar la narración de hoy debo hacer unas aclaraciones. Pensé en no volver a escribir la columna o busca a alguien que de pronto buscar a un sustituto, ya que la abandoné debido a que me concentré en una relación estable*.

No estaba buscando una relación, pero a veces las cosas pasan porque tienen que pasar. La relación no fue mala… Pero de pronto mi ex me indicó sin motivo alguno que terminaba conmigo.

Esto me frustró, pero entiendo que en ocasiones se debe dar espacio a la pareja. Intenté solucionar las cosas -sin saber qué pasó- pero no hubo resultados.

Soy un hombre que está en la década de los cuarenta, no es una edad para andar experimentando. Las rupturas amorosas afectan a cualquiera aunque muchas veces no se expresen.

Cuando pasan este tipo de cosas no vienen solas, unos dos días después de la ruptura me llama mi jefe a su oficina. “Lo siento, pero tenemos que hacer recortes”, me dijo con pesar. Cuando escuché esto sentí cómo se terminaba de desmoronar mi vida.

Desempleado y algo devastado, veo como pasan los días sumido en mis pensamientos.

Pero entonces llegó un rayo de esperanza: una entrevista de trabajo… Fui la entrevista laboral con altas expectativas, pero días más tarde se comunicaron conmigo para indicarme que no fui elegido. Lo más frustrante es que esto se ha repetido varias veces.

Esta mañana fui citado por una agencia para un puesto qué un conocido me recomendó. Me pongo mi mejor traje pensando que esta vez será la vencida cuando de pronto me escriben del lugar dándome el siguiente mensaje: Lo siento la posición ha sido cancelada.

No se, entiendo que el “lo siento” lo hacen con la intensión de no sonar tan duro, pero el efecto no deja de ser el mismo.

Estoy en la Vía Argentina a las 7:00 A.M., aguantándome las ganas de echarme a llorar por la desesperación. Pero recuerdo lo que me dijo una casi algo cuando me mandó a volar dándome la noticia que volvía con su ex -que hasta ese momento era lo peor del mundo- que “los hombres no lloran”.

Cuando analizó que las cosas no pueden ponerse peor la lluvia comenzó a caer. Las gotas eran pesadas y frías, como si el cielo estuviera llorando junto sobre mí.

Quedé empapado, pero no sentía el frío por la impotencia que me embargaba. Mientras busco donde pasar la lluvia, me tropiezo una anciana.

La señora me saluda y me pregunta algunas cosas por lo que le indique “¿si me conoce?”, sintiendo una extraña mezcla de curiosidad y miedo.

Su respuesta fue algo más que intrigante. “Hijo te hicieron un trabajo”.

“¿Qué quiere decir con un trabajo?”. La anciana se acercó un poco más, y con una mirada profunda y penetrante, me dijo: “Alguien ha invocado fuerzas que han comenzado a consumir tu vida. No es solo mala suerte; es un destino trazado por manos oscuras”.

Pienso en lo que me dice la anciana por algunos segundos, cuando razonó al ver mi rostro reflejado en una vitrina. Tengo la cara demacrada con ojeras, la tristeza se me nota a leguas.

La doña casi me hace caer en esa trampa… Regrese a mi casa a empezar de cero nuevamente.

RELATED ARTICLES

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Advertisment -

Most Popular