RÍO DE JANEIRO, 27 de julio. /TASS/. Las principales corporaciones y empresas de Brasil piden al presidente del país, Luiz Inácio Lula da Silva, que renuncie a la imposición de aranceles de represalia a los productos estadounidenses, incluso después de la entrada en vigor de los aranceles de EE.UU. del 50% sobre los productos de la nación sudamericana a partir del 1 de agosto, informó la revista brasileña Veja.
Según su información, los empresarios ya se han dirigido al vicepresidente de Brasil, Geraldo Alckmin, para que este obtenga el consentimiento del líder brasileño para no introducir medidas de represalia. Las empresas temen la reacción de Washington y el aumento del tamaño de los aranceles.
“Esperamos que los Gobiernos de Brasil y Estados Unidos lleven a cabo negociaciones diplomáticas exhaustivas y pospongan estos plazos. Pero si Estados Unidos no presenta propuestas [de contrapartida] y el arancel entra en vigor, Brasil seguirá insistiendo en negociaciones continuas”, declaró el presidente ejecutivo de la Asociación Brasileña de la Industria de Maquinaria y Equipos, José Velloso. Para el representante industrial, en este momento las exportaciones brasileñas “no pueden ser redirigidas a otros mercados”.
Por su parte, Lula da Silva ya ha expresado su deseo de que Alckmin encabece una delegación a EE.UU. y negocie la abolición de los aranceles estadounidenses. “Él, obviamente, no es tan ronco como yo, ni tan enojado como yo. <…> Es un negociador excelente”, dijo el jefe de Estado brasileño sobre el vicepresidente. Al mismo tiempo, la publicación añadió que Alckmin está listo para viajar a EE.UU. después de que las partes acuerden previamente al menos un aplazamiento de los nuevos aranceles.