Prevenir los ataques cibernéticos es uno de los mayores desafíos profesionales y personales en la actualidad, debido a la existencia y combinación de una amplia gama de amenazas que surgen constantemente.
Según datos de Check Point Software Technologies, partner de Soluciones Seguras, los ciberataques aumentaron un 50% en 2021. Esta tendencia alcanzó un máximo histórico en el último trimestre del año, llegando a 925 ciberataques por semana por organización en todo el mundo. Latinoamérica experimentó un promedio de 1.118 ataques semanales, lo que representa un aumento del 38% desde el 2020.
Sin embargo, los ciberataques no solo afectan la información sensible de las empresas. Un análisis de bases de datos realizado por Imperva Research Labs, también partner de Soluciones Seguras, determinó que, un 74% de los datos robados son datos personales. Además, se detectó que más del 15% de las infracciones dieron como resultado el robo de credenciales (contraseñas) y más del 10% resultó en el robo de detalles de tarjetas de crédito”.
“Nuestros datos personales son nuestra identidad en el ciberespacio. Si alguien se hace pasar por nosotros o tiene acceso a nuestras cuentas, los daños pueden ser muy grandes, ya sean económicos, reputacionales, o inclusive trasladados a nuestra vida presencial. Hay que ser tan cuidadosos con nuestros datos como lo somos con nuestras joyas, dinero efectivo, pasaporte, o la llave de nuestra casa,” expresa Eli Faskha, CEO de Soluciones Seguras.
El ámbito de la privacidad digital es cada vez más complejo, por ello, en el marco del Día Internacional de la Protección de Datos Personales, a celebrarse este 28 de enero, Soluciones Seguras hace un llamado a evitar estos errores que vulneran la seguridad y privacidad de su información personal:
· Uso de contraseñas débiles. Las claves alfanuméricas y símbolos son parte de nuestra vida cotidiana y a ellas les confiamos gran parte de nuestra identidad virtual.
Crear combinaciones simples y fáciles de recordar, o bien, tener una sola contraseña para todos los servicios o cuentas son un grave error. Entre mayor cantidad de caracteres y símbolos tenga una contraseña, es más segura. Además, diversificarlas es una mejor práctica.
· Brindar demasiada información personal a través de comunidades abiertas, como Marketplace. Al tratar de vender o comprar artículos, debe tener en cuenta que se estará tratando con personas desconocidas. Antes de hacerlo, revise la configuración de privacidad y realice los ajustes necesarios para evitar que su información como publicaciones, ubicaciones, entre otros detalles, sean accesibles.
· No leer las políticas de privacidad. Al aceptar términos y condiciones en apps o sitios web, está otorgando acceso a contenido como fotos, mensajes, ubicaciones, fechas, entre otros datos personales.
También se expone a que las aplicaciones compartan e incluso se vendan a terceros cuando haya una transmisión de empresas. Por ello, es importante que siempre lea la letra pequeña.
· Ingresar a links desconocidos o abrir correos de dudosa procedencia. Los enlaces y correos maliciosos siguen siendo una de las tácticas más utilizadas por los ciberdelincuentes para conseguir la información personal y venderla, o bien, cometer otros delitos como la suplantación de identidad.
Antes de hacer clic, verifique la dirección del correo electrónico o procedencia del link.
· Utilizar redes públicas. Al conectarnos a redes WiFi públicas, las operaciones quedan expuestas, vulnerando los datos, tráfico e identidad ante los delincuentes cibernéticos.
Si por alguna razón especial debe utilizar este tipo de red, evite realizar transacciones bancarias o consultar datos sensibles. Además, asegúrese de cerrar todas las cesiones una vez que haya finalizado el trabajo y desactivar su dispositivo de la red pública.
