El Programa de Alto Riesgo Neonatal (PAR) de la Policlínica “Dr. Blas Gómez Chetro”, en Arraiján, está destinado a la prevención, seguimiento, control e intervención temprana del recién nacido.
El programa está compuesto por un equipo multidisciplinario conformado por un médico pediatra, dos licenciadas de estimulación temprana, una fonoaudióloga y una nutricionista.
La doctora Marisol Lombardo, coordinadora regional y local del Programa de Alto Riesgo Neonatal de la policlínica de Arraiján, destacó la importancia de los controles ya que esto ayudará a detectar, de manera temprana, posibles problemas en el neurodesarrollo del bebé.
Por ello, son de vital importancia las citas de estimulación temprana, fonoaudiología y nutrición, que de manera alternada con los padres deberán continuar el tratamiento en casa para evitar complicaciones.
Por su parte, Zuleika López, estimuladora temprana, dijo que durante las sesiones se brinda estimulación multisensorial y psicomotora al infante, que a través de los sentidos le permite al niño explorar, conocer e identificar todo lo que se encuentra en su entorno. Además, de fortalecer el vínculo entre padres e hijos.
Para favorecer el óptimo desarrollo del niño, las actividades de estimulación temprana comprenden cuatro áreas: cognitiva, psicomotriz, lenguaje y socio-emocional.
En cuanto al área de fonoaudiología, la Lcda. Isamar Sánchez indicó que “sin audición no tenemos lenguaje” por lo que hay que prestar atención en la comunicación verbal del niño la cual dependerá de su edad.
Durante el primer año de vida del niño, su comunicación se realizará a través de balbuceos, sonrisas y llantos , y empieza a reconocer rostros.
Es de suma importancia no hablarle al niño en diminutivo, ni utilizar celular, ni la televisión para entretenerlo.
Para estimular la audición, entre las recomendaciones brindadas por la fonoaudióloga está poner música, que ayuda a relajar y permite que el niño se vaya adaptando a su medio ambiente. También, llamarlo por su nombre, sonarle juguetes y no introducir ningún tipo de objeto, ni palillos en el oído del menor. Para su limpieza se debe hacer con una toallita y de tener algo fuera de lo común consultar con su pediatra.