Por Jorge I. González
Abogado
La Universidad de Panamá en el corazón del pueblo.
Una síntesis temprana de todo lo ocurrido a lo largo de las cuatro semanas de la gran Gesta Patriótica, desde el lunes 23 de octubre al 28 de noviembre de 2023, cuando se produce el fallo de inconstitucionalidad contra la Ley 406 del llamado Contrato Minero, es una labor necesaria y nada fácil, la cual sin duda está pendiente.
Sin embargo, y pese a que las consecuencias de estos acontecimientos cruciales que impactaron a la conciencia nacional e hicieron temblar al poder político y económico, se encuentran en pleno desarrollo, creemos que estamos en condiciones de destacar el relevante papel de la Universidad de Panamá, de las fuerzas de la primera casa de estudios superiores de la nación, espacio de vanguardia en el debate nacional y la lucha por los intereses del pueblo en el marco de la “Gesta Patriótica de 2023”.
Los sucesos acaecidos durante los meses de octubre y noviembre de 2023 fueron precedidos por la agitación nacional y el activismo académico social universitario en torno a la cuestión minera y específicamente, respecto a la perspectiva de aprobación a tambor batiente por la Asamblea Nacional de Diputados y el Ejecutivo, del contrato minero entre Cobre Panamá (First Quantum) y el Estado Panameño.
La Universidad de Panamá jugó un papel importante en esta gran lucha del pueblo panameño en los ámbitos académico y sociopolítico. Veremos la prolífica actividad académica de la Universidad de Panamá sobre el tema minero y luchas sociales de los sectores de la institución en rechazo al Contrato Minero.
Así las cosas, en los meses de mayo y junio de 2023, en la región de Azuero, específicamente, en el Centro Regional Universitario de Azuero, CRUA, se desarrollaron debates sobre la minería de Cerro Quema y el recinto universitario regional fue un hito de las movilizaciones de la fuerza social de la región contra los efectos negativos de la actividad minera.
En agosto, la Universidad de Panamá, a través de su Vicerrectoría de Asuntos Estudiantiles, organizó el martes estudiantil titulado “Actividad Minera y su impacto”. También en agosto, el Instituto del Canal de Panamá y Estudios Internacionales de la Universidad de Panamá, realizó en el Campus Central la conferencia “El Contrato Minero del Estado Panameño y First Quantum”.
A nivel nacional crecía la efervescencia respecto a la temática minera y el contrato entre Cobre Panamá y el Estado, siendo más que visibles las intenciones de imponer el mismo por encima de la voluntad democrática del pueblo. La Universidad de Panamá, en sus comunicados y actos académicos, fue correspondiendo el ánimo e interés de la ciudadanía en cuanto a la minería y en especial, el Contrato con First Quantum.
Haciéndose eco del sentir nacional, el Consejo Académico de la Universidad de Panamá, en su sesión del 13 de septiembre de 2023, mandató la realización de foros y conferencias sobre las implicaciones ambientales, comunitarias, económicas y sociales, en las diversas unidades académicas y administrativas. En ese contexto, el Consejo Académico del 13 de septiembre definió que fuera la Vicerrectoría de Extensión de la UP, el ente encargado de coordinar la realización de un magno foro sobre el Contrato Minero.
La Asociación de Profesores de la Universidad de Panamá, APUDEP, al igual que las facultades de Derecho y Ciencias Políticas, Humanidades, Ciencias Agropecuarias y los centros regionales universitarios de Azuero (Herrera) y Los Santos, habían realizado ya conferencias sobre el mencionado contrato y la actividad minera en Panamá.
El cenit de la actividad académica se produce, efectivamente, el miércoles 27 de septiembre, cuando la Vicerrectoría de Extensión, siguiendo las líneas trazadas por el Consejo Académico del 13 del mismo mes, organizó el foro “Contrato Minero: economía o ambiente”, en las instalaciones del Centro Regional Universitario de Coclé.
Los resultados de este magno evento en Coclé y todos los anteriores, aunado a la expectativa popular de rechazo en ascenso a la Asamblea Nacional, crearon las condiciones para un nuevo pronunciamiento del Consejo Académico de la Universidad de Panamá. Así, el 28 de septiembre los medios de comunicación informaron que el Consejo Académico de la Universidad de Panamá solicitaba la suspensión del debate del contrato minero.
El ejecutivo suspendió el debate, pero lejos de escuchar el clamor ciudadano de rechazo al contrato, fue una maniobra y reanuda el debate en la Asamblea Nacional e impone a tambor batiente, a sangre y fuego, la aprobación y sanción del Contrato Minero, consumado en la Ley 406, generándose el mismo lunes 23 de octubre, la repulsa global legítima del pueblo panameño y el estallido de la indignación en las calles de la capital y todo el país. Se inicia la “Gesta Patriótica del 2023.”
El lunes 23 de octubre, hacía horas del mediodía, grupos estudiantiles, junto a administrativos de la Universidad de Panamá, se manifiestan en la avenida Transismica en señal de rechazo a la aprobación del contrato minero por la Asamblea Nacional y su inminente sanción por el órgano ejecutivo.
En horas de la tarde, un grupo de universitarios se desplazó a la Plaza 5 de mayo y en comunión a jóvenes indignados, se manifestaron en las afueras de la Asamblea Nacional, desatándose la represión. En el resto de la capital y las provincias del país, tanto comunidades y organizaciones sociales,
se lanzaron a las calles para expresar su perplejidad ante la arrogancia gubernamental. En horas de la noche se producen en la calle 50 hechos de represión contra manifestantes convocados por plataformas de redes sociales. Participan también estudiantes de la UP.
El 24 de octubre y a tan solo horas de haberse producido el estallido social de la Gesta Patriórica de 2023, el Consejo Académico de la Universidad de Panamá exigió a las autoridades del Estado la revocatoria del Contrato Minero establicido en la Ley 406, señalando en su momento que “la sociedad panameña ha manifestado su inconformidad (con el contrato) con demostraciones de protestas generalizadas en todo el país”. En la avenida Transismica, grupos de estudiantes y trabajadores protestaban contra la imposición de la ley 406.
Cabe señalar que en los meses precedentes al estallido del 23 de octubre, las organizaciones estudiantiles y de trabajadores universitarios realizaron diversas conferencias, así como acciones de protesta como piqueteos y marchas en alianza a sectores, el movimiento social panameño en oposición a la aprobación del contrato minero.
Ante la movilización de masas y la represión del estado en la calle 50, en los días siguientes al 27 de octubre, la Universidad de Panamá se confirmó como baluarte de la autonomía y a ella ingresaron buscando refugio cientos de manifestantes, tal vez miles, en los primeros días del estallido, cuando se replegaban evitando las embestidas policiales en las zonas Marbella, Calle 50, Obarrio y Vía España, de la ciudad capital.
El equipo de legal de la Defensoría de los Universitarios, así como otros abogados solidarios pertenecientes a la Universidad de Panamá, se dedicaron al socorro jurídico de detenidos universitarios e incluso, manifestantes no universitarios, retenidos por la Policía.
La avenida Transismica, rebautizada por los estudiantes “Avenida de la Resistencia”, es bloqueada por espacio de un mes. Inédito en la historia. Por otra parte, en el área de la Iglesia del Carmen y en la Avenida Manuel Espinosa Batista, se producen también manifestaciones nocturnas de jóvenes, dándose escenarios de represión y confrontación con las fuerzas del estado. La protesta en la Transístmica (Ave. Resistencia) también será objeto de represión en varias ocasiones.
Los grupos estudiantiles MJP, MIRA, FER, GEN-T, PAT, Reforma Estudiantil, CAOS, GEL, Fuerza Joven y los sindicatos de administrativos SINTUP y SITEN, participaron en protestas durante semanas en las avenidas periféricas a la UP. El grupo Voz Verde, de la Facultad de Ciencias Agropecuarias, también se hizo presente. Cabe mencionar la simpatía de la población del barrio de Viejo Veranillo frente a la Universidad de Panamá. Se produjeron hermosos gestos de hermandad popular, como cuando pobladores cruzaron a la UP a entregar sopas y agua a los estudiantes que por espacio de cuatro semanas se mantuvieron en vigilia permanente.
Las asociaciones de los pueblos originarios de la Universidad de Panamá, a saber, la Asociación de Estudiantes Ngöbe Buglé, la Asociación de Estudiantes Kunas y Asociación de Estudiantes Guna y Emberá Wounan, también expresaron su rechazo al Contrato Minero en las calles de la capital y el resto del país.
En los centros regionales del país, los universitarios de los 3 estamentos, se manifestaron beligerantemente contra el Contrato Minero.
La Asociación de Profesores de la Universidad de Panamá, APUDEP, del Campus Central , del Campus Harmodio Arias Madrid y del Centro Regional Universitario de San Miguelito, CRUSAM, acompañados de decanos, así como por administrativos y estudian, salieron por espacio de dos semanas a la Vīa Transistmica a manifestarse mediante piqueteos, dirigiéndose también al área frontal a las instalaciones de la Caja de Seguro Social, en la vía, para protestar en unión a médicos y enfermeras de la noble institución de salud.
El Campus Central de la Universidad de Panamá fue, en la coyuntura de la GESTA PATRIÓTICA DE 2023, el espacio más bombardeado con gases lacrimógenos y artefactos represivos, a nivel nacional. El efecto del lanzamiento indiscriminado y masivo de gases lacrimógenos se hace sentir en las áreas de la Cresta, Vía España, Vía Argentina y el Cangrejo.
Docentes de la Asociación de Profesores de la Universidad de Panamá, junto a administrativos y estudiantes, salieron a la Vīa Transistmica a manifestarse, dirigidose también frente a las instalaciones de la Caja de Seguro Social, para protestar en unión a médicos y enfermeras de la noble institución de salud.
Por espacio de cuatro semanas, casi todos los sectores representativos de la vida nacional expresaron de una u otra manera su rechazo al contrato minero y su postura de derogatoria o demanda de inconstitucionalidad de la Ley 406.
El 1 de noviembre, en horas de la tarde, el dirigente nacional de los educadores, Prof. Diógenes Sánchez, de enseñanza media y nivel universitario, fue detenido por unidades de la Policía Nacional, ante lo cual el rector de la Universidad de Panamá, Prof. Eduardo Flores, el presidente de la Asociación de Profesores de la UP, Prof. José Álvaro, el Defensor Universitario, Prof. Gilberto Marulanda, acompañados de docentes, dirigentes estudiantiles y abogados de la UP, se apersonaron a las instalaciones del Juzgado de Calidonia en señal de respaldo al Prof. Diógenes Sánchez, quien fue puesto en libertad.
Horas antes, en la mañana de ese mismo 1 de noviembre, se realizó el acto patriótico universitsrio en honor al mes de noviembre, mes de la patria, en las instalaciones del Campus Harmodio Arias Madrid de la Universidad de Panamá. En su discurso como orador de fondo seleccionado, el Prof. Franklin De Gracia, hizo una narrativa de las luchas de independencia y de liberación nacional contra el colonialismo norteamericano en la antigua Zona del Canal, a la vez que expresó de manera vehemente el rechazo de los universitarios al Contrato Minero y la solidaridad de la Casa de Octavio Méndez Pereira con el pueblo panameño que luchaba en distintos puntos del país.
En la capital y en distintos puntos del país, las plataformas de redes sociales contra la corrupción y ambientalistas, así como los movimientos sociales organizados, desarrollaron en los días 3 de noviembre y 9 de noviembre, grandes movilizaciones de protesta.
El 7 de noviembre, en un bloqueo en la comunidad de Chame, provincia de Panamá Oeste, fueron asesinados de manera vil dos panameños del movimiento de educadores, los ciudadanos Iván Mendoza y Abdiel Díaz. Su cruel asesinato por arma de fuego, a manos de un ex zonian (Zona del Canal), generó una ola de dolor y deseo de justicia. Días antes, el 1 de noviembre, en horas de la noche, murió en el cierre de la Interamericana, en Horconcitos, provincia de Chiriquí, el educador indígena de origen Gnöbe, Tomás Cedeño. Por atropellamiento. Al volante del vehículo iba un extranjero Los 3 caídos fueron declarados por todas las fuerzas convocantes a nivel nacional, como Mártires de la Gesta Patriótica de 2023.
El 15 de noviembre, en reunión celebrada en el auditorio José Dolores Moscote de la facultad economía de la Universidad Panamá, el Consejo General Universitario, CGU, convocó la realización de una gran marcha universitaria para el 22 de noviembre, hacia la Corte Suprema de Justicia, para exigir la promulgación del Fallo de Inconstitucionalidad contra la Ley 406 del Contrato Minero entre el Estado y First Quantum. Se realizarían marchas universitarias hacia las sedes del órgano judicial en las diferentes cabeceras del país.
Durante la sesión del CGU de aquel miércoles 15 de noviembre, un automóvil de la Policía Nacional ingresó a la Universidad de Panamá, sin permiso de las autoridades internas, representando dicho acto una violación flagrante de la autonomía universitaria. El 18 de noviembre fue presentada ante el ministerio público una denuncia penal por parte de la Defensoría de los Universitarios en representación de la Universidad de Panamá y por mandato del plenario del CGU del 15 de noviembre. En el acto de denuncia ante el ministerio público se hizo acompañamiento también a la denuncia del abogado Gilberto Solís, funcionario de la Universidad de Panamá, herido por la represión cuando se manifestó pacíficamente en Calle 50 de la capital.
Llegamos así al día de la marcha. En la mañana del 22 de noviembre, el emblemático Parque Hacia la Luz y el estacionamiento de la Facultad de Humanidades, se convirtieron en un hervidero de pasión patriótica popular, inmensas masas universitarias provenientes de todos los sectores de la Casa de Octavio Méndez Pereira, se concentraron y entusiastas iniciaron su marcha desde el Campus Central hacia la Corte Suprema de Justicia, recorriendo la Avenida Nacional y recibiendo el saludo entusiasta, pailas en la mano, de parte de la población del barrio de Curundú.
La enorme movilización universitaria contó con la participación de varios miles de universitarios y universitarias. La marcha colmó la corte suprema de justicia, al igual que jsus calles adyacentes, y constituyó un contundente golpe de las fuerzas sociales de la nación en las vísperas de un fallo que solamente mediante la presión del pueblo podía ser de inconstitucionalidad.
Como castigo a la colosal demostración de civismo universitario, el Campus Central fue inmisericordemente bombardeado de gases por las fuerzas policiales en horas de la tarde y la noche de aquel histórico 22 de noviembre. La voluntad de los universitarios y universitarias fue inquebrantable.
En los albores del 28 de noviembre, apenas asomándose el sol, se anuncia el Fallo de Inconstitucionalidad total contra la Ley 406, convirtiéndose en la más grande victoria social del pueblo panameño en el Siglo XXI y en una constatación del papel motriz de la Universidad de Panamá en el devenir histórico de la formación social panameña, junto al pueblo.
Panamá, 3 de diciembre de 2023