Las empresas familiares en los últimos años siguen creciendo a pasos agigantados, lo que impacta de manera positiva en el desarrollo de la economía de los diferentes países por su estrecha relación con la generación de empleos y, por ende, del crecimiento económico.
Panamá no es ajeno a esta realidad. No obstante, a este rol de creación de riqueza y contribución económica, que a menudo tiene dificultades para trascender públicamente, se suma una idiosincrasia que las hace únicas. El legado, la cultura familiar y el amor por aquello que han creado los antepasados son valores extremadamente diferenciales, sumados a su característico inconformismo, capacidad de innovación y visión para internacionalizarse.
Hoy día, la empresa que no reflexione sobre su contribución al mercado y destile los atributos que definen su diferenciación, autenticidad y legitimidad, se quedará desbancada por los acontecimientos. Esta es una de las conclusiones del informe: “Empresa familiar, de la creatividad a la relevancia”.
A través de este informe, LLYC analiza el nuevo paradigma en el que se encuentran las empresas familiares y los retos de futuro a los que se enfrentan en términos de marca, reputación y sostenibilidad del negocio, así como las oportunidades en las que se traduce.
En ese sentido, la evaluación destaca que a menudo, el perfil bajo y discreto que siempre las ha caracterizado, la falta endémica de estrategias sólidas de marca y comunicación, sumado a un contexto donde han cobrado protagonismo los fondos y multinacionales, así como la necesidad de apostar por la transparencia y otro tipo de liderazgos, ha hecho que su imagen y percepción pública pierdan relevancia y notoriedad.
Así, la empresa familiar no sólo se enfrenta al reto de abanderar un posicionamiento renovado para conquistar nuevos territorios, nuevas audiencias, nuevas tendencias y conectar con la sociedad de hoy, sino que tiene el complejo desafío de remar para prestigiar toda su categoría construyendo una nueva reputación en positivo.
Poner en valor y de forma efectiva sus factores de éxito definidos por el IEF, como la planificación a largo plazo, la alta calidad de servicio y bienes, la flexibilidad mediante la concentración de la propiedad, la gestión del talento a través de políticas personalizadas de recursos humanos y la estabilidad en cuanto a los principios básicos y las líneas estratégicas fundamentales, será clave para lograrlo.
Cómo saber dónde estás
De acuerdo con este informe, la empresa familiar tiene el desafío de crear valor sostenible y relevante para todos los grupos de interés y para ello, deberá definir y trasladar su propia historia, definiendo de forma consciente el papel que el atributo familiar juega en la misma. Investigar, conceptualizar, cocrear, diseñar e implementar marcas sólidas con unos pilares claros para que puedan ser comunicados interna y externamente, contribuirá a alcanzar los objetivos de la compañía.
Además, toda empresa familiar debe velar por contar con Planes de Comunicación de Crisis y Riesgos que le permitan estar protegida y fortalecida durante todo el ciclo de vida del riesgo reputacional.
Este tipo de empresas tienen el desafío de impulsar estrategias de comunicación destinadas a mejorar el alineamiento y compromiso del equipo actual, así como de captar nuevos perfiles, impulsando los cambios necesarios que se deben de dar en las compañías para acompañar el crecimiento del negocio.
Conclusiones
Entre las conclusiones del informe: “Empresa familiar, de la creatividad a la relevancia”, las empresas familiares deben pasar del perfil bajo de comunicación a liderar la transparencia conversacional, de valorar el atributo familiar a utilizarlo como palanca de competitividad y escudo reputacional, de atributos heredados a estrategias y herramientas de escucha social para incorporar las motivaciones y drivers de los stakeholders principales y nuevas generaciones a las narrativas.
Además, las empresas deben pasar de estrategias de comunicación interna a construir nuevas relaciones con el talento para transformarlo en el principal embajador, del proteccionismo a preparar la entrada de nuevos socios que abogan por respetar y cultivar la cultura corporativa.
