En un ambiente de alegría y emoción, alrededor de 89 privados de libertad del Centro Penitenciario La Joyita, culminaron con satisfacción sus estudios de bachiller en comercio, demostrando que con voluntad, esfuerzo y organización se pueden alcanzar las metas propuestas y las acciones orientadas a favorecer su reinserción social.
Para Juventino Vásquez Ortega, subdirector Nacional de Educación de Jóvenes y Adultos, “la educación es una herramienta fundamental para la reincorporación de los internos en su vida profesional. Hoy celebramos no solo una graduación, sino el cambio hacia un futuro, sabiendo que se han esforzado por transformar sus vidas de manera positiva”.
El programa de educación en La Joyita busca promover la responsabilidad social, proporcionando a los privados de libertad oportunidades que les permitan integrarse de manera efectiva al mundo laboral una vez cumplan sus condenas.
Además de los cursos académicos, el evento incluyó testimonios inspiradores de los graduados, quienes compartieron su experiencia y agradecimiento por la oportunidad de cambiar sus vidas a través de la educación. “Este diploma no solo representa el conocimiento adquirido, sino también la esperanza de un futuro diferente”, afirmó, Jorge Frías, primer puesto de honor.
David Phillips, segundo estudiante destacado, expresó: “el hecho de que nos encontremos en este lugar no es una limitación, por el contrario, es un reto, ya que con el apoyo de nuestros familiares tenemos un aliciente para seguir adelante creyendo en nuestros potenciales¨.
Con esta graduación, el Ministerio de Educación y el Sistema Penitenciario unen esfuerzos para continuar ofreciendo programas educativos que contribuyan a la rehabilitación de los privados de libertad y a la construcción de una sociedad más justa y equitativa.
Participaron en esta actividad, Jorge Torresgorza, director del Sistema penitenciario; Vicente Vargas, coordinador Regional de Panamá Centro y Jerónima Branca, coordinadora Nacional de Centros Penitenciarios.