LA HAYA, 9 de diciembre. /TASS/. Países Bajos envía el barco Den Helder al mar Caribe en medio de las continuas tensiones en la región, anunció el Ministerio de Defensa del país europeo.
El ente castrense señaló que en este momento no existe una amenaza para los territorios pertenecientes a Países Bajos en el Caribe, la decisión de enviar el barco se explica por “precauciones”. Proporcionará “apoyo logístico” a las fuerzas neerlandesas si es necesario.
Según el Ministerio de Defensa, el barco Den Helder ya había estado en las aguas del Caribe, donde participó en pruebas en climas cálidos en octubre y más tarde visitó los puertos de Norfolk y Nueva York.
Tensiones en el Caribe
La situación en el Caribe se ha agravado debido a las tensiones entre Estados Unidos y Venezuela. Washington acusa a Caracas de combatir insuficientemente el narcotráfico. Según el diario The New York Times, Trump autorizó a los servicios de inteligencia de EE.UU. a realizar operaciones encubiertas en Venezuela. Medios estadounidenses han informado repetidamente que Washington podría comenzar pronto a atacar objetivos en el país caribeño.
En agosto, The New York Times comunicó que Trump había firmado una directiva clasificada para comenzar a usar la fuerza militar contra los carteles de la droga latinoamericanos. Posteriormente, se desplegaron importantes unidades militares estadounidenses adicionales en el Caribe. Washington lanzó entonces ataques aéreos contra embarcaciones utilizadas, según el Gobierno estadounidense, para transportar drogas a EE.UU. en el mar Caribe y el Pacífico Oriental. En noviembre, el Pentágono anunció que un grupo de ataque de buques estadounidenses, liderado por el portaaviones USS Gerald R. Ford, había entrado en la zona de operaciones del Comando Sur de EE.UU. para combatir el narcotráfico en la región.
Según el canal de televisión CNN, el Ejército estadounidense ha destruido más de 20 embarcaciones frente a las costas latinoamericanas en los últimos meses con el pretexto de combatir el narcotráfico, causando la muerte de más de 80 personas. Tras uno de estos ataques, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, declaró que la operación estadounidense había matado a un pescador de su país, no a un narcotraficante.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, declaró previamente que el pueblo y las Fuerzas Armadas venezolanas estaban listos para defender el país de las amenazas imperialistas. Señaló que el país ha vivido “aproximadamente 22 semanas de terrorismo psicológico”, pero durante este tiempo “el pueblo en unión cívico, militar y policial se ha preparado para defender el camino de la construcción de la Venezuela libre, soberana y socialista”.
