Cuando Samsung Electronics presentó su televisor QLED en 2017, tocó la cima de innovaciones de pantallas. El producto, ideado en base a la tecnología de puntos cuánticos, significó un relevante avance en visualización de imágenes y, a la vez, la implantación de un nuevo estándar para el mercado mundial de televisores. Progresivamente, las constantes revisiones técnicas de los equipos de diseño de la marca surcoreana, a fin de avanzar a un nivel más alto, dieron con un siguiente paso de renovación: el Neo QLED.
De esta manera, en la galería de televisores de Samsung que se exhiben en las tiendas físicas y online, destacan estas dos opciones inmejorables a la hora de comprar y así satisfacer la intención de contar con la mejor pantalla en el hogar. Cada una tienen atributos excepcionales, que se detallan a continuación.
Mil millones de colores y mayor vida útil
Los TV QLED de Samsung elevaron la tecnología de puntos cuánticos a avanzados niveles de eficiencia de luz, estabilidad y un espectro de colores más amplio. Como lo indican los especialistas en la materia, posee 100% del volumen de color. Esto quiere decir que en ellos se ven imágenes con “mil millones” de tonos cromáticos con un realismo como si fuera la reproducción de la vida misma, con nitidez y vivacidad no vistos antes en una pantalla de televisor.
Estas pantallas están compuestas con material inorgánico Quantum Dot, lo que les otorga mayor durabilidad, porque están exentas del riesgo de quemaduras de pantalla y sobrecalentamiento de sus fuentes de poder, pues no tiene el problema de retención de imagen. De allí que la calidad de la reproducción visual permanece en el tiempo y no disminuye a pesar del uso.
Hay que sumarle más puntos al desempeño de ese TV: su innovadora aleación metálica que recubre los Quantom Dots, permite que se mantenga la calidad de reproducción, sin distorsión de colores, en caso de que el espectador cambia el ángulo desde el que mira su pantalla.
Y como cada vez más se habla de “calidad de imagen cinematográfica”, esta pantalla no es la excepción. Alcanza un brillo máximo de 4.000 nits, que es el nivel estándar de las producciones del séptimo arte a nivel global. El resultado es como si la persona estuviera disfrutando en una sala de cine: escenas con fondos más negros y colores más intensos, además del soporte de HDR10+ con óptimos niveles de brillo.
Un perfil más avanzado
A principio de este año, Samsung presentó los TV Neo QLED, un producto evolucionado de la tecnología QLED. La marca surcoreana redujo el tamaño de los LED, con lo cual se logró un mejor control, menos sangrado de luz y una graduación más precisa de oscuro a claro. En síntesis, un perfil más avanzado que hasta ese momento no se había alcanzado en otro televisor.
Otro de los atributos que respondió a la premisa de obtener una inmersión total de visualización para los usuarios se logró con las pantallas Infinity, como parte de un modelo delgado y elegante. Posee un marco de acero inoxidable de 8 mm que elimina el límite entre la pantalla y su entorno, cuyo diseño redujo los biseles a un punto de casi ser imperceptibles. Así busca producir la sensación al espectador de que la pantalla está flotando.
En relación con la calidad del sonido, cuenta con sistemas de orificio de altavoz y subwoofer incorporados a la parte posterior de la pantalla. La calidad de sonido es óptima y no requiere de un altavoz adicional, gracias a la tecnología de Inteligencia Artificial.
El cable de conexión también fue objeto de una solución estética en el Neo QLED. Se rediseñó el accesorio One Connection (Una conexión) integrado a la base del televisor y se denominó One Connect Delgado Extraíble. De esta manera el cable no es visible, pues se mimetiza como un simple soporte.
Ventajas para juegos en los dos modelos
Tanto a la nueva línea Neo QLED como a los QLED, Samsung Electronics ha incorporado un rendimiento optimizado para los consumidores que quieren que sus TV sean aliados de sus experiencias de juegos, sea desde una PC o desde una consola.
Estos TV están diseñados para habilitar juegos 4K, a una frecuencia de actualización de 120Hz. En el caso de los QLEDs de Samsung hacen que el usuario pueda ver prácticamente todos los detalles con 4K con características de alto nivel: imágenes que se reproducen a 120 cuadros por segundo, tiempo de respuesta bajo en ms, modo automático de baja latencia, frecuencia de actualización variable y otras características de juego diseñadas incluso tomando en cuenta consolas de próxima generación.
En el modo Game, los jugadores pueden activar la Game Bar, para ajustar fácilmente la relación de aspecto de la pantalla, verificar el retraso de entrada, conectar auriculares inalámbricos y otras funciones. Y para maximizar la experiencia de juego, ofrecen un audio nítido, claro e inmersivo.