Siete personas privadas de libertad costarricenses fueron repatriadas este martes a Costa Rica, para que culminen sus condenas en su país de origen, entrega formal que se efectuó en las oficinas del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), ubicada en el puesto fronterizo de Paso Canoas, provincia de Chiriquí.
De los repatriados, dos procedían del centro penitenciario de Deborah, Bocas del Toro; uno, de La Nueva Joya; uno de La Joya; tres, del centro penitenciario de Chiriquí y una femenina del centro femenino Nueva Esperanza, Colón, quienes estaban condenados por delito de blanqueo de capitales, tráfico internacional de drogas y posesión de drogas.
Estas repatriaciones son con fundamento en la Convención Interamericana para el Cumplimiento de Condenas Penales en el Extranjero de la cual la República de Panamá y la República de Costa Rica son Estados parte.
En esta diligencia participaron funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores, Dirección General del Sistema Penitenciario, Servicio Nacional de Migración con el apoyo de la Policía Nacional y de Senafront. Por Costa Rica, participó el Consulado en David y autoridades de la Dirección General de Adaptación Social del Ministerio de Justicia y Paz.