En la provincia de Veraguas, año tras año se registra una importante incidencia de personas mordidas por serpientes, siendo los principales afectados, los trabajadores rurales.
En lo que va de octubre, ya se han reportado cuatro incidentes, que se suman a los entre 30 y 40 casos, que se estima se han dado este año, comunicó la Dra. Aida Romero, especialista en medicina interna e investigadora científica que labora en el Hospital “Dr. Ezequiel Abadía”, de la Caja de Seguro Social, en el distrito de Soná.
La especialista detalló que las mordeduras ocurren principalmente en las zonas rurales, afectando a los trabajadores del campo, por lo que se considera que estos incidentes entran dentro del rango de los riesgos y enfermedades ocupacionales.
Cualquier mordedura debe ser tratada con seriedad independiente si es o no venenosa.
Detalló la doctora, que la serpiente responsable del más del 95% de los casos es la Bothrops Asper, conocida localmente como «víbora negra», especie fácilmente irritable, que tiene la reputación de ser rápida y agresiva.
Factores como las charlas sobre medidas preventivas de salud y seguridad ocupacional, considera la doctora, han influido para que este año, se hayan dado menos casos, si se compara con 2023, cuando se dieron unos 70 reportes de mordeduras por ofidios.
Entre esas sugerencias ofrecidas en esas docencias, está el utilizar botas de caucho altas, caminar en fila y hacer ruido al transitar por zonas rurales, ¿la razón?, las serpientes tienden a ser tímidas y evitan el contacto con los humanos, al advertir su presencia.
Es crucial afirmó saber cómo actuar ante una mordedura de serpiente. Las primeras medidas incluyen inmovilizar al paciente; evitar el uso de torniquetes o remedios caseros, y llevar al afectado de inmediato, a una instalación de salud como el Hospital “Dr. Ezequiel Abadía”, el Hospital Dr. Luis «Chicho» Fábrega en Santiago y el Hospital de Cañazas, donde cuentan con antiofídicos muy efectivos.
La geografía de Veraguas, con su exuberante vegetación tropical y numerosos ríos, proporciona un ambiente ideal para el desarrollo de serpientes. Las lluvias abundantes también contribuyen al aumento de estos incidentes, sobre todo en áreas como Soná, donde el entorno facilita la presencia de estos reptiles, acotó la funcionaria.