Una enfermedad que en los últimos tres años en Panamá ha tenido un incremento entre la población infantil, es la sífilis congénita, una afección que se presenta cuando la madre contagiada le transmite la infección al bebé durante el embarazo.
La Dra. Kathia Luciani, infectóloga pediatra en el Hospital de Especialidades Pediátricas “Omar Torrijos Herrera” de la Caja de Seguro Social, dijo que la sífilis congénita es una infección que puede ser prevenida, siempre y cuando la madre se haya realizado las pruebas diagnósticas apropiadas y el tratamiento oportuno.
“Esto no es solamente de nuestro país, sino que a nivel mundial se ha visto cómo se han incrementado los casos de embarazadas con sífilis. Y si estas mujeres no reciben tratamiento adecuado durante el embarazo, por consecuencia los niños, entonces, adquieren la infección”, manifestó la infectóloga.
Destacó que el año pasado el hospital atendió alrededor 10 neonatos contagiados con esta enfermedad, por lo que recalcó la importancia de que las embarazadas se hagan sus exámenes a tiempo, a fin de poder controlar el avance de la infección.
“El tema con la sífilis es que existe una política de la OMS y OPS, de la cual Panamá se acoge como país miembro, de eliminar la trasmisión de sífilis congénita. La meta es alcanzar tasas nacionales menores a 0.5 casos por mil nacidos vivos; por ejemplo, en el 2020, Panamá tenía una tasa de 3.3 casos por mil nacidos vivos, y eso está muy por encima de la meta que debemos alcanzar, situación que es preocupante”, recalcó la Dra. Luciani.
Por último, recomendó a las embarazadas y aquellas que deseen en un futuro convertirse en madres, que se hagan la prueba de sífilis: “Lo importante es realizarse los exámenes antes del embarazo, tener un control prenatal y acudir al médico; para que, en el caso de ser diagnosticada con sífilis, pueda ser tratada con penicilina, un tratamiento que es sumamente efectivo”, señaló.