Las autoridades tradicionales indígenas aglutinadas en la Coordinadora Nacional de Pueblos Indígenas de Panamá (COONAPIP), denuncian a las autoridades de gobierno de imponer una serie de “trabas” y requisitos exagerados para implementar los dos millones de dólares aprobados como un fondo de “emergencia” para atender las necesidades de los territorios indígenas afectados por la pandemia del coronavirus.
Indicaron que han pasado más de cinco meses que el pleno del Consejo Nacional del Plan de Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CONDIPI) aprobó el fondo de los dos millones para atender con prioridad las necesidades de los territorios originarios para luchar contra el Covid.
Marcelo Guerra, Presidente de COONAPIP, dijo que “es una burla más del gobierno hacia los pueblos indígenas, que ya se están levantando las medidas de cuarentena nacional y no ha sido posible la utilización de los fondos que era para ayudar a palear las necesidades en esta crisis sanitaria”.
“Cada uno de los 12 territorios plantearon sus necesidades prioritarias de medicamentos, insumos de seguridad, facilidades de transporte e infraestructura comunitaria básicas para luchar contra la pandemia, pero no ha sido posible por los excesivos requisitos y exigencias que parecieran tener otros objetivos y no realmente cumplir con los compromisos adquiridos con nuestros pueblos”, advirtió Guerra.
Indicó el líder indígena que hay un mal sabor entre las autoridades tradicionales ya que “pareciera existir otro objetivo para la utilización de los dos millones de dólares aprobados y no necesariamente para atender la urgencia sanitaria planteada por los territorios indígenas”.
“Si no se corrige esta situación y el gobierno toma las medidas que se requiere conforme a la propuesta de las autoridades indígenas que representan las 12 estructuras de los pueblos originarios del país, estamos evaluando seriamente levantarnos de la mesa del Plan de Desarrollo de los Pueblos Indígenas de Panamá por ser inoperante”, concluyó Marcelo Guerra.