Jonathan Fernández y Clifford Ballantyne, fueron condenados a 87 meses de prisión tras haber sido aprehendidos por medio de un operativo de venta controlada.
Fernández y Ballantyne fueron detenidos el 3 de febrero de 2020, en un operativo conjunto de la Fiscalía de Drogas de Colón y Guna Yala y la Policía Nacional.