Para nadie es un secreto que en Panamá los profesionales de la comunicación mantienen diferencias históricas de índole, gremial, profesional y que muchas de estas situaciones están ligadas a hechos políticos y económicos en la última década, que separan la verdadera esencia del gremio. Estas mismas situaciones han sido olvidadas en medio de la crisis generada por la pandemia Covid-19.
El Covid-19 ha transformado al ser humano, convirtiéndolo en más vulnerable a apreciar lo simple de la vida. Dentro de esta grave situación hay historias dentro de los profesionales del periodismo que se conjugan con la realidad de miles de panameños de los cuales estamos acostumbrados a hacer noticias y muchas veces a ver su dolor, sin saberse, que se vive igual que ellos. Hambre, desempleo, incertidumbre, enfermedad, dolor, nervio, miedo, angustia y muchas más.
Nuestras historias las estamos contando ahora, hemos dejado a un lado el tener como patente de corso -el carné de periodista-, para decirles al resto del mundo que somos panameños y sufrimos igual que ustedes. Es la realidad de más de doscientos periodistas cesados y despedidos que tratan de sobrevivir junto con sus recién nacidos, niños y niñas, madres, esposas, hermanos, toda una familia.
Cuando hablamos de la pandemia, sabemos que 182 mil personas han sido víctimas mortales del Covid 19, situación que superamos todos los días cuando los equipos periodísticos en la primera línea se enfrentan a ser un nuevo contagiado que podría perder la batalla. Gracias a muchos factores no ha pasado como en otros países.
Esto que traemos a la palestra nos indica que como bases y gremios nos hemos fortalecido en la parte afectiva conjugada con lo profesional como seres humanos que somos; con solidaridad y defensa propia. Antes y durante la crisis del Covid-19 se han registrado despidos tanto en el Estado como en el sector privado, lo que ha generado que muchos periodistas, fotógrafos y camarógrafos queden tácitamente sin empleo y en medio de injusticias.
Nos impactan las estadísticas de desempleo, comunicadores cesados e independientes sin un futuro en el medio. Es por ello que las principales organizaciones periodísticas con una beligerancia histórica y que han enfrentado cada momento en defensa de sus colegas, hoy lo hagan, uniendo esfuerzos, exigiendo respeto a los periodistas y sin doblegarse ante el poder.
Sindicato de Periodistas de Panamá y Colegio Nacional de Periodistas no han dejado solos en esta pandemia tan crítica a sus afiliados y no afiliados. Sin distingo alguno, han visto muchos casos. La unidad de la cual invocamos al principio de esta nota, se ha convertido en solidaridad, acompañamiento, sentimientos y profesionalismo.
Es importante recalcar que la pandemia ha generado cambios positivos como también hemos visto actuaciones en contra, que buscan silenciar y humillar las voces que caminan junto a su gremio.
La indiferencia es cosa del pasado, la unidad del presente y la esperanza del futuro.
Las metas están basadas en la Unidad histórica, de la cual hacen falta protagonistas insignes como los gremios de bases en Colón y Chiriquí y que como gremios unificados recibirán también el respaldo recíproco en tiempos difíciles.
Solo por parafrasear conversaciones y denuncias actuales, recordamos algunas: A aquel colega que dijo tengo miedo del Covid 19, por mi madre y mi familia, hoy sabemos que puedes estar con ellos y seguir aportando al país desde tu hogar sin dejar de hacer periodismo, porque vuestras voces fueron escuchadas. Aquel que con lágrimas dijo solo me queda para esta quincena, hoy tiene una recompensa solidaria por su esfuerzo de años y que es reconocido a través de sus propios compañeros.
El periodismo juega un papel fundamental en la sociedad, no desmayen a sus derechos humanos, a los derechos laborales, a tu salud, a tus reivindicaciones y a tu independencia.
De esa esperanza del futuro, vienen cambios sustanciales, aquellos que nos obligan a reinventarnos en el periodismo nativo, independiente, orgánico, humanístico e innovador. Los cuentapropistas o independientes seremos más. Estemos preparados para este futuro de producción totalmente propio, trabajadores del periodismo panameño.
