Desde el inicio del proceso de negociación del Tratado de Libre Comercio entre Panamá y los Estados Unidos, gremios como la Asociación Nacional de Avicultores de Panamá y la Asociación Nacional de Porcinocultores nos opusimos y reclamamos reiteradamente la exclusión de nuestros rubros de cualquier fórmula que conllevara una apertura comercial total y advertimos que un resultado de esa naturaleza significaría a futuro la ruina de la producción agropecuaria de nuestro país.
Luego de 16 años de finalizada esta negociación, el tiempo ha demostrado que prácticamente ninguna de las expectativas o promesas que se nos hicieron para contrarrestar nuestro fundado rechazo a la adopción de este acuerdo comercial se han hecho realidad, ya que los productores y el pueblo panameño en general son testigos que nunca ha sido cierto que hemos tenido acceso a vender nuestros productos en el mercado americano, ni mucho menos que con los volúmenes de importación que le cedimos a Estados Unidos a cambio de nada, los alimentos importados han abaratado el costo de la canasta básica familiar.
Todo lo contrario, lo que ha significado la negociación de este tratado para Panamá ha sido una balanza comercial abismalmente desfavorable a nuestro país, desplazamiento de la producción nacional a causa de las crecientes importaciones y comercio desleal derivado de los multimillonarios subsidios otorgados a los productores americanos y de la asignación de precios por debajo de los costos de producción de varios rubros que compiten con los productos panameños.
Transcurridos 12 años desde la entrada en vigencia del Tratado, los rubros sensitivos de la producción panameña como las carnes de pollo y cerdo, entre otros, hemos venido impulsando la intervención rápida y oportuna de nuestras autoridades, encabezadas por el presidente Laurentino Cortizo , para que se le brinde un tratamiento de interés y seguridad nacional al tema de la revisión del TPC con Estados Unidos de América, ante los efectos del desmantelamiento de la protección arancelaria y la apertura comercial total que puede tener consecuencias devastadoras para la sostenibilidad de importantes y estratégicas actividades de producción de alimentos, pero sobre todo en lo relacionado con la preservación de las fuentes de empleo y la paz social en el medio rural panameño.
Ante la frágil e indefensa situación que amenaza la existencia del agro panameño y de los rubros que representamos, es necesario y urgente que asumamos una postura nacional en defensa de nuestros productores, emulando la política agrícola de la administración Biden que, a través de voceros de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos y haciendo referencia al compromiso de la representante máxima de dicha oficina, embajadora Katherine Tai destacan que el trabajo de dicha Oficina está enfocado en la tarea de abrir mercados para los agricultores estadounidenses, lo cual llevará productos de USA alrededor del mundo, agregando que probablemente algunos no estarán de acuerdo con su agenda, pero que su enfoque es el trabajador americano, para asegurar que ellos sean los que se beneficien de sus políticas de intercambio comercial, tal como fue recogido el pasado 14 de marzo por el sitio especializado Drovers.
Com-Farm Journal Publication. Ante el inminente detrimento que sufrirá la producción nacional de alimentos de no acordarse fórmulas con nuestro socio comercial que mitiguen el potencial de daño que tiene la apertura comercial, instamos a las organizaciones de productores, consumidores, gremios empresariales, sindicatos, partidos políticos, aspirantes a puestos de elección popular y demás fuerzas vivas del país a sumarse al llamado que por este medio estamos haciendo al Gobierno Nacional, para que retome y no abandone la lucha que no es en contra de nadie, sino a favor de nuestros productores, trabajadores, consumidores y de nuestro derecho y responsabilidad de garantizar la producción de los alimentos que consumimos y, por ende, de la protección de nuestra seguridad y soberanía alimentaria, de la misma forma que con toda legitimidad y enfoque políticamente correcto la Administración Biden defiende a sus agricultores y trabajadores estadounidenses y de la misma manera que también el Presidente de República Dominicana, Luis Abinader ha salido públicamente a defender a los productores de arroz de su país.
Ante la poca disposición que han mostrado los representantes comerciales y diplomáticos de Estados Unidos de considerar y discutir antes del año 2025 las propuestas del gobierno y los productores panameños para una revisión del TPC, solicitamos al presidente Cortizo que, como una muestra más de su compromiso en favor del agro de nuestro país, instruya al Señor Ministro de Comercio e Industrias Federico Alfaro Boyd, para que, con la urgencia y prontitud que la situación amerita, se ponga al frente de las gestiones para solicitar a nuestro socio comercial que, de conformidad con el Artículo 19.1 del Tratado de Promoción Comercial se coordine una reunión de la Comisión de Libre Comercio, para que se presenten y se discutan las propuestas de la República de Panamá, a través de las cuales se sustente la necesidad de que mediante la adopción de un esquema o marco renovado de intercambio comercial, resulte posible la coexistencia de la producción nacional con las importaciones de productos americanos y que abriendo esa nueva oportunidad para sólo 4 productos agropecuarios sensitivos, el TPC pueda seguir fluyendo como instrumento de promoción comercial con plena vigencia y resultados que sean de mutuo beneficio para ambos socios comerciales.