La decisión de salir al mercado, es parte de una estrategia financiera, que se diseña para afrontar determinadas situaciones relativas a las Finanzas Públicas.
Desde que asumimos la jefatura del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), hemos enfrentado una serie de crisis, entre las que cabe destacar, la caída importante de ingresos tributarios y no tributarios por debajo de lo presupuestado, el pago de obligaciones de las cuentas por pagar de la administración pasada, el COVID19, la desaceleración de la economía con el consecuente aumento del desempleo y la informalidad. Cada una de ellas ha requerido diseñar estrategias e implementar acciones de forma tal que las mismas sean atendidas de la manera más eficiente.
La fuerte caída en los ingresos públicos, que estimamos que para este año estarán aproximadamente en B/. 3,000 millones por debajo de lo presupuestado, nos obliga a salir al mercado a obtener los recursos para atender la brecha que esto origina y así también fortalecer la ejecución del presupuesto 2020.
La operación que hoy realizamos nos permitió colocar la suma de $2,575 millones en bonos. Parte de dichos fondos nos servirán para recomprar bonos locales que vencen en el 2021 y 2022 respectivamente y así obtener tasas más favorables. El detalle de la transacción es el siguiente: la colocación del nuevo bono por $1,250 millones con vencimiento en el 2032 a un rendimiento de 2.252% (el más baja en la historia de Panamá a este plazo), la reapertura del bono con vencimiento en el 2060 a un rendimiento de 3.28% por 1,000 millones y la reapertura de la nota local con vencimiento en 2026 a un rendimiento de 2.77% por $325 millones.
La reacción del mercado fue extremadamente positiva recibiendo ofertas por cerca de $10,000 millones, lo que demuestra una gran aceptación del mercado, consolidando así nuestra posición en la región y reafirmando la confianza de los inversionistas. Los principales compradores de los bonos panameños provienen de Estados Unidos, Europa y Asia.
Es fundamental destacar que el equipo del MEF, desde el inicio de su gestión ha afrontado las crisis de manera responsable. Prueba de ello es la forma en que se han gestionado los recursos, que son los estrictamente necesarios para afrontar cada situación, siempre en los mejores términos posibles y garantizando la capacidad de pago de la deuda.
El objetivo de final de estos esfuerzos es manejar la crisis sanitaria, social y financiera de la mejor forma posible.