El café actúa como estimulante del sistema nervioso, la cafeína que se encuentra en esta bebida bloquea un químico cerebral llamado adenosina, la cual es la que ocasiona la sensación de somnolencia.
La cafeína se encuentra en los granos de café, en las hojas de té, nueces de cola (estas se utilizan para dar el sabor a las bebidas de cola) y el chocolate. La Dra. Yanibeth Córdoba, pediatra de la Unidad Local de Atención Primaria de Salud, ULAPS Sra.
Lastenia Canto Solís, en Capira, recomendó, que los niños no deben de tomar café, ni ninguna bebida que contengan cafeína, ya que son más susceptibles a los efectos de esta sustancia.
Córdoba mencionó que el consumo de cafeína en niños puede producir: Problemas de sueño (dificultad para conciliar el sueño, mala calidad del sueño, somnolencia durante el día).
Adicción a la cafeína y síntomas de abstinencia (dolor de cabeza, fatiga, dificultad para concentrarse, irritabilidad, cambios de humor).
Ansiedad, nerviosismo aumento de la frecuencia cardíaca o arritmias. Presión arterial alta. Diarrea, malestar estomacal. Deshidratación.
Para evitar el consumo de bebidas que contengan cafeína, ofrezca leche o agua y limite las sodas para ocasiones especiales.