NUEVA YORK, 10 de junio. /TASS/. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, exhortó al Gobierno de Estados Unidos a que detuviera las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en la ciudad para detener a inmigrantes ilegales.
“Espero que el Gobierno federal escuche nuestra solicitud: detengan las redadas”, declaró la funcionaria en una conferencia de prensa. La política calificó estas acciones como “injustificadas e innecesarias” y destacó que las fuerzas de seguridad solo “generan miedo y caos en la ciudad”. Según ella, las operaciones afectarían la economía del estado ya que los migrantes, que constituyen “la mayor parte de la fuerza laboral”, tendrían “miedo de ir a trabajar”.
Asimismo, la alcaldesa calificó la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de enviar tropas de la Guardia Nacional a la urbe como “un intento de crear desorden y caos” en Los Ángeles.
Medios estadounidenses informaron que el 6 de junio comenzaron detenciones masivas de inmigrantes indocumentados en Los Ángeles. Para la noche del 7 de junio, al menos 44 personas se encontraron bajo custodia por cargos de violación de las leyes migratorias. En respuesta a las acciones de las fuerzas del orden, estallaron manifestaciones en la ciudad, que derivaron en disturbios. Según el canal de televisión CBS, la multitud intentó obstruir el trabajo de las fuerzas del orden, bloqueó carreteras y lanzó piedras y petardos contra las fuerzas del orden. La Policía detuvo al menos a 56 personas en Los Ángeles durante el fin de semana.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, pasando por alto al gobernador de California, Gavin Newsom, ordenó el despliegue de tropas de la Guardia Nacional en Los Ángeles. Asimismo, Newsom presentó una demanda contra Trump y el jefe del Pentágono Pete Hegseth. El gobernador solicita que se declare ilegal la decisión de desplegar a los combatientes de la Guardia Nacional en Los Ángeles. Según CNN, alrededor de 1.700 soldados de la Guardia Nacional están desplegados en el área de Los Ángeles. El Departamento de Defensa de EE.UU. anunció entonces que enviaría alrededor de 700 efectivos del Cuerpo de Infantería de Marina a la ciudad.
