A finales de febrero e inicios de marzo del 2020, Eloy Núñez es diagnosticado con linfoma de Hodgkin, un tipo de cáncer que se caracteriza por el crecimiento acelerado y desordenado de las células linfocitos, aunque puede afectar también otros órganos.
En el lado derecho de su cuello creció un ganglio o masa, al que no le mostró mayor importancia, ya que no le ocasionaba ningún tipo de malestar, contó Núñez.
Luego de unos cuatro a cinco meses, uno de sus compañeros de labores se percata que tenía un ganglio inflamado, que aducían podía ser a causa de una infección o un resfriado, sin imaginar que el diagnóstico sería otro.
Ely fue sometido a diferentes test diagnósticos de enfermedades infecciosas como VIH, Tuberculosis, Toxoplasmosis y Hepatitis, causantes de adenopatías o ganglios con resultados negativos, por lo que correspondía hacer una biopsia.
Relató que al realizarse la biopsia de la masa confirman que padecía de cáncer, similar al que había sufrido hacía un par de años un familiar paterno (tío), por lo que además existía un factor genético relacionado.
Síntomas que se pueden presentar
Usualmente el linfoma de Hodgkin presenta síntomas como: adenopatía o ganglios acompañados de fiebre, pérdida de peso y sudoraciones, pero existen casos en que no se presentan síntomas visibles.
Tratamiento
Culminando su primera sesión de quimioterapia le diagnostican COVID-19, un virus del cual poco se conocía, pero que se propagaba rápidamente en cada uno de los continentes, excepto en la Antártida.
Núñez, quien laboraba en ese momento como médico en el servicio de Urgencias de la Policlínica “Dr. Blas Daniel Gómez Chetro”, de la Caja de Seguro Social (CSS), en Arraiján, inmediatamente fue aislado y puesto en cuarentena por 40 días aproximadamente.
Manifestó que pese a su enfermedad, no tuvo complicaciones a causa de la COVID-19.
Tras culminar su cuarentena retomó su tratamiento de quimioterapia que duró entre 4 a 5 meses y, luego un mes más de radioterapia, para finalizar con un examen de control denominado PET (tomografía por emisión de positrones) que consistía en un examen de imagen que inyecta un contraste radioactivo y determina en que parte del cuerpo hay o no presencia de cáncer.
Ese examen resultó negativo de malignidad dijo el doctor Núñez, sin embargo, esto no significó que no había cáncer, sino que el cáncer no podía ser detectado por las técnicas diagnósticas o pronosticas, expresó.
Condición actual
Desde octubre del año pasado se encuentra en el periodo de remisión en el cual el paciente no es dado de alta, ni se considera curado, pero continúa bajo observación médica con seguimiento y evaluaciones periódicas (cada 4 meses) por un espacio de 5 años.
En estas evaluaciones según explicó se valora también que los otros órganos como el hígado y riñón se encuentren estables luego del tratamiento con quimioterapia.
Experiencia de vida y recomendaciones
“Vivir cada instante como si fuera el último y aprovechar las oportunidades que nos da la vida” fue la reflexión del doctor Eloy Núñez, que hoy continúa la lucha contra el cáncer.
La familia, manifestó, es la pieza principal, su apoyo incondicional que le ha permitido seguir adelante.
Como recomendación dice que es fundamental acudir anualmente a sus controles de salud y ante cualquier signo de alarma no dudar en asistir al especialista para un diagnóstico oportuno. La prevención es la mejor la cura, concluyó.
