Fundamentado en los Objetivos de Desarrollo Sostenible y el Plan de Acción del Consejo Permanente Multisectorial para la Implementación del Compromiso Nacional por la Educación (Copeme), el Ministerio de Educación, a cargo de Maruja Gorday de Villalobos, desarrolla el plan estratégico del quinquenio 2019-2024. Con su liderazgo y proactividad, promueve el acercamiento con docentes de todo el país, padres de familia, estudiantes, directivos de centros escolares y organizaciones que trabajan en beneficio de la enseñanza panameña.
Uno de los grandes logros representaba la culminación satisfactoria del año escolar 2019, y de forma paralela, organizar el inicio del 2020. Ambas acciones se cumplieron como estaba planificado y organizado. Pero la alegría de regresar a la escuela en marzo, con la satisfacción de comenzar un periodo escolar como nunca antes se logró, solo duró pocos días, para ser más preciso nueve. Como cuando asistimos a una obra de teatro, bajó el telón en los colegios.
Llegó el inesperado Covid-19 a nuestro país. La ministra adoptó la medida responsable, promovida por el Estado, de suspender las clases en las escuelas oficiales. Acompañó esta decisión con la sugerencia del uso de módulos y plataformas virtuales, en aquellos colegios particulares en que el uso de la tecnología estuviera al nivel de las exigencias para cumplir con el proceso enseñanza-aprendizaje. De acuerdo con la Unesco, hay más de 1,500 millones de estudiantes sin poder asistir a clases por la pandemia, un 91% de 188 países.
De manera emprendedora, con el equipo asesor, directivos, especialistas, técnicos, docentes, entre otros, la ministra estableció acciones que han ayudado a encontrar las vías para que el sistema educativo continúe ofreciendo el servicio a los alumnos con los estándares mínimos de calidad. La Unesco promueve la continuidad del aprendizaje del estudiantado durante el confinamiento a través de la formación online. Por una parte, hay más de 150 centros educativos oficiales en todo el territorio nacional, cuyos educadores ofrecen sus servicios con herramientas básicas de tecnología, apoyados por la plataforma de la web del Meduca; inclusive, algunos alumnos son asistidos con módulos escritos.
Los colegios privados han intentado seguir ofreciendo el servicio a través de plataformas virtuales. En este sentido, el Meduca convocó a las escuelas particulares interesadas en brindarlo de manera virtual que, para lograr esta opción, los directivos de estos centros educativos deben completar un formulario en que se requiere información y cumplir con los componentes básicos de entornos virtuales de aprendizaje. Dicho documento se encuentra de manera sencilla al llegar a la web del ministerio.
Los colegios privados autorizados son aquellos que lograron cumplir y demostrar las evidencias de los cincos criterios establecidos: interacción pedagógica, elementos curriculares, recursos tecnológicos, educación especial y satisfacción con proceso. Por el momento, 220 fueron aprobados. El Meduca no ha dejado de trabajar y, con esta experiencia, se aboca a transformaciones y a la modernización con transparencia, convocando la participación de todos los sectores del sistema educativo. Por otra parte, el equipo técnico y directivo proyecta revisar y realizar los controles necesarios en el Plan Estratégico y Operativo de la institución, adecuándolo a la situación del día y su entorno.
Edín Vásquez, MBA-MFT
